¿Que será que el ser humano muchas veces se comporta con el prójimo, como si fuera el peor de los animales? Hago esta mención porque claros ejemplos podemos tener entre los animales los cuales los cuidan con celo desde el nacer, tienen cuidos muy especiales y siempre los aman, pero existen animales que los “matan” desde el nacer o lo peor del caso los abandonan para que sea la rapiña la que se encargue de ellos, por sus “defectos”, en éstos casos son defectos de nacimiento pero en el caso del ser humano los culpamos por defectos adquiridos en la vida y muchas veces heredados... ¿suena cruel verdad? ¿Pero qué podemos pensar de nosotros? ¿Ya nos hemos cuestionado nuestras actitudes hacia nuestros hijos?
¿Duele? Claro que te duele!!!
Cuando menciono hijos, no nos remontemos a aquellos años hermosos, en donde somos “todo” para los padres los cuales nos llenan de cuidos y nos protegen siempre, pero ¿que sucede cuando el tiempo pasa... ? Nuestros padres quieren que hagamos lo que ellos hacían, que seamos amigos de los hijos de sus amigos, que estudiemos sus carreras y tengamos su mismo nombre. Como padre puedo decir que es una teoría completamente equivocada de hacia dónde y cómo tenemos que enfocar nuestra vida y la de ellos.
Comprendo la preocupación de nosotros como padres para poder procurarles lo mejor de la vida cuando son jóvenes, pero no logro comprender cuando ya adultos queremos “interferir” en su plan de vida, no estoy hablando de opinar, inferir etc. , sino de “interferir” y es irónico ver parejas mayores en misa, comulgar y dar la Sagrada Ostia pero que no tienen la solvencia moral de estar en paz con Dios sabiendo que han abandonado sentimentalmente a sus hijos y peor que eso, son capaces de echarles en cara a diario, todos sus problemas, ¿que pensará Dios de estos padres? Señores, Dios lee los labios pero lee mas detenidamente nuestra mente y alma !!!...
Esto lo veo a diario en nuestra querida sociedad, tan atestada de problemas sociales, y uno de ellos es llamado el divorcio. ¿Que es el divorcio? Podríamos talvez definirlo como el instrumento que el humano inventó para separarse físicamente del cónyuge. En realidad no me quiero detener a conjugarlo ya que no es de mi interés, pero podemos hacer ciertos análisis de las consecuencias personales que esto conlleva.
Como padre estoy seguro que nunca deseamos que esto suceda a uno de nuestros queridos hijos, pero ¿cual es la actitud de algunos “padres” ante el divorcio de un hijo o hija?, mi subconsciente lógico me dice que muchos reaccionan en extender esa mano para no hacer mas amargo el camino, dan buenos consejos de cómo terminar suavemente el trámite, los acogen nuevamente en sus hogares y son su mejor apoyo en estos casos de crisis existencial por ser la victima del divorcio.
Pero la lógica NO cabe en estas situaciones ya que podemos ver diariamente a “padres y madres” avergonzándose de que un hijo o hija esta pasando por un divorcio y su reacción es:¿ Qué dirá la sociedad?, ¿Mis amigos?, ¿Mis parientes?, "sería bueno que pidieras la anulación..." , etc. pero lo que menos pensamos es en poner ese hombro y abrir esos brazos de ayuda para poder sacar adelante sentimentalmente a nuestros queridos hijos, me enferma solamente de pensarlo...
Recordemos que los hijos son para SIEMPRE, pero muchas veces no lo pensamos así ya que por el hecho que se fueron de la casa pensamos que ya pertenecen a otra “persona”.
Hablando de esa “persona” quiero hacer mención de ellas, llamadas cónyuge en su momento, pero llamado ex-cónyuge en este caso, es aquí en donde los cónyuges convertidos en padres yerran al 100% queriendo muchas veces “comprar” a nuestros hijos para tener afecto con ellos, señores el afecto no se compra, el afecto se siembra, se cultiva y se recoge en el futuro!!!!! Veamos a nuestro alrededor tantos de estos casos en los cuales lo único que hacemos es arruinar su niñez ó confundir su juventud, por el simple hecho que compramos los sentimientos a través de lo material, materialismo maldito que tarde o temprano nos revienta en la cara con grandes sorpresas, y te das cuenta que en realidad fue posiblemente por la única razón que tus hijos estuvieron a la par tuya, ¿que tristeza verdad? Porque cuando no tengas lo material, no te voltearan ni a ver en la calle,
Que tristeza que por el hecho de estar divorciados, ya no tenemos tiempo de NADA con nuestros propios hijos, llegamos al punto de ya no poder compartir un instante de felicidad y logros con ellos, somos incapaces de acampar nuevamente en una montaña, recibir sus notas del colegio, ver por la noche las estrellas y sus partidos de fútbol ¿y saben porqué? Porque creen que con esas actitudes hacen daño al ex-cónyuge y podrían tener razón en eso, pero el mayor daño es para los hijos, los cuales se sienten abandonados y menos preciados en la vida por quien “supuestamente” tendría que amarlos incondicionalmente, ¿cual será el concepto de afecto que estaremos sembrando en ellos?
Demos siempre lo mejor de nosotros a nuestros hijos sin importar su condición...ellos no pidieron venir a este mundo sino que nosotros los trajimos y no tenemos el derecho de arruinar sus vidas...
Este es un tema que causará polémica porque cada padre de familia piensa de manera diferente de cómo educar a sus hijos, pero la idea es utilizar todos esos “beneficios” para que se vuelvan hacia nosotros como padres de familia y que podamos disfrutar y enseñar a nuestros hijos el verdadero valor de lo material y que aprendan para que se utilizan logrando unirnos mas y no perder ese calor de familia.
