Al remontarnos a los inicios de la civilización, existió un medio de transporte muy peculiar, llamado “barca”. Al pensar en ello nos imaginamos las diferentes formas de ésta, diferente tamaño, para diferentes tipos de agua etc.
Y es aquí en donde nace mi reflexión sobre éste tema.... en nuestra vida nosotros tenemos que utilizar medios para poder llegar a nuestras metas, pero el logro más grande de nuestras vidas es poder navegar con nuestra familia por los diferentes océanos.... imaginémonos que nuestra vida es un viaje en una barca en la cual tiene que existir los diferentes mandos como por ejemplo, el CAPITAN es el Padre, quien dirige a la tripulación y la barca hacia destinos seguros basado en su experiencia y buen sentido común. Por otra parte el TIMONEL es la Madre, que sin la orientación adecuada podríamos llegar a perder el rumbo y tomar una dirección errónea conforme a la carta de navegación, la cual son nuestras vidas. Por último, pero no menos importante, es la TRIPULACIÓN, nuestros hijos, quienes son los que toman las labores diarias de aprendizaje y ayuda incondicional en la barca.
El pasar del tiempo en nuestras vidas, es como aquellos grandes océanos en los cuales tenemos que navegar con nuestra barca. En un inicio cuando partimos del puerto, nuestro matrimonio, todas las aguas son calmas y el sol brilla todo los días pero al adentrarnos en los océanos es cuando enfrentamos las verdaderas tormentas... y es aquí en donde se pone a prueba nuestras habilidades como marineros, el saber conducir y mantener a la tripulación estable emocionalmente para que no sea un detonante que incite al amotinamiento y nos lleve al desastre. Momentos en los que el entendimiento y la comunicación son nuestros mejores aliados... el saber dar y recibir una orden puede ser la diferencia entre el subsistir y el naufragar.
Hagamos un alto en nuestro arduo navegar, pensemos en lo bueno que hemos hecho y démonos una palmadita en el hombro, pero más importante es analizar lo que no hacemos bien y tomemos cartas en el asunto, para que el día de mañana cuando veamos partir de los puertos a nuestra TRIPULACION convertida en CAPITANES Y TIMONELES, podamos descansar tranquilos en la playa pensando que sabrán dominar y conducir su barca, no importando las inclemencias del tiempo y así poder decir, Dios mío .... misión cumplida !!!!!
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